Face♀ to face♂ . (Parte IV)

Ella ♀

Nos despierta el timbre de la puerta, los dos nos  sobresaltamos, no hablo pero con mi expresión lo digo todo. 

– Es la que me limpia, dejé la llave puesta para que no pudiera entrar.

Sale cerrando la puerta de la habitación. Me da un poco de vergüenza salir, pero cuando lo hago y veo esa sonrisa en su cara se me pasa todo. Casi me olvido que con él cerca todo va bien. Nos pasamos toda la mañana en pijama, tirados en el sofá, fuera está nevando.  Hasta por la noche no nos decidimos a salir... cena en un Vips. Me da igual donde me lleve... salir que no salir. 

Es curioso que ahora que estamos juntos no hablamos mucho, a veces nos quedamos mirándonos durante largo rato, pero sin hablar (me siento cómoda en esos silencios). Estar con él me hace sentir como en un refugio cálido y acogedor donde he encontrado todo lo que necesito. Es cariñoso, detallista, amable, bromista, inteligente seguro...  y en la cama es... es... upss!! ja, ja, ja.

Al día siguiente nos despertamos tarde, pero nos quedamos en la cama hablando, me cuenta más cosas de su vida, de su trabajo… Le escucho y trato de imaginármelo en esas situaciones (aún me queda tanto por saber de él)... 

Pienso que aún me quedan tres días más para estar allí… Tres días que se pasan volando…  

Si me ve agachada no reprime las ganas de darme una palmada en el trasero… salidas en moto por la ciudad muertos de frío… besos… risas… caricias… ir cogidos de la mano… una copa en algún sitio… dormir y despertar juntos… (Sugar Free❤)

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Él ♂

Otra noche de pasión... ni recuerdo las veces que lo hicimos. 

Pasamos el día vagueando, disfrutando de nuestra compañía, disfrutando de esos silencios que son tan expresivos y esas miradas de complicidad. Salimos a cenar y despejarnos un poco de tanta casa. Al volver, sin cerrar la puerta siquiera nos unimos en un beso... mis manos se aferran a su cuerpo para apretarla contra mi... la llevo contra la pared... soy el dueño de la situación. La agarro por las muñecas y levanto sus brazos por encima de su cabeza... mientras la seguía besando. Como puedo le quito el abrigo y lo suelto por ahí... desabrocho su blusa... le beso el cuello, sus pechos... se estremece entre mis brazos... suspira con cada beso o roce de mi lengua. Le desabrocho el vaquero y se lo quito... le abro las piernas y me pierdo entre ellas... sus dedos se entrelazan en mi pelo... Seguíamos en la entrada, su boca en mí y mi boca en ella, nuestro único objetivo es darnos placer el uno al otro... veo reflejada nuestra imagen en el espejo y me excito aún más... necesito sentirla. La empujo al sofá... Me estremezco cuando siento el calor del interior de su cuerpo y con un ritmo casi salvaje... explotan nuestros sentidos.

Por la mañana aunque era tarde, nos quedamos en la cama hablando, contándonos cosas de nuestras vidas, algunas ya las conocíamos por nuestras largas charlas telefónicas, otras nos las contamos por primera vez. Me sentía bien con ella, me daba un punto de serenidad en mi vida. 

Los días están pasando deprisa pero todavía nos queda alguno para estar juntos. Sentía un sabor agridulce, agrio porque se nos acababa el tiempo y dulce porque el poco que quedaba podía seguir disfrutando de ella. (Fer©)